Mercurio y Urano Ápex

En la figura de tensión, T Cuadrada, el elemento preponderante de la misma es el vértice exterior, también conocido como Ápex, es pues el elemento, casa o planeta que ocupe este lugar quien marcara gran parte del carácter y dimensión otorgada a esta figura, de la misma forma que el área de influencia en la que recae el peso energético de este vértice y hacia donde se dirigen los esfuerzos de la misma. Por lo que la naturaleza y singularidad del planeta que ocupe el Ápex, nos dará las claves del dominio de la energía contenida en la T Cuadrada.
 
 
En mis estudios de diferentes casos, he llegado a la conclusión de que esta figura genera un gran desgaste y concentra en su Ápex un especial foco de atención energética para el individuo, debido a la naturaleza férrea y fija de la propia estructura de la figura misma, puede llegar a convertirla en algo mas violento, imprevisible, molesto y complicado de manejar (Ya sea a nivel puramente Psicológico o Externo) cuando alguno de los planetas implicados es Urano o Mercurio.
 
 
Esto es así, por varios motivos, primero por la naturaleza excéntrica, dual, imprevisible de ambos, mas Urano como catalizador de imprevistos y repentinos acontecimientos de muy difícil manejo, y luego Mercurio por su carácter tan personal pero también por su naturaleza excéntrica, dual e incómodamente mutable en algunos casos, en los que como en el ejemplo se encuentra imbricado en una figura de tensión.
 
 
Cuando el Ápex, es Urano la energía de la figura tiende a dispersarse, ser susceptible de “idas y venidas”, vaivenes y todo tipo de desagradables acontecimientos ulteriores o exteriores que golpean a nivel social o transpersonal, pero dejando una dura e indeleble huella en la propia naturaleza intima y personal del individuo.
 
 
Luego el “travieso” mercurio, hace que todo el esfuerzo y energía centrada en su figura, pueda ser trastocado por el capricho de un desgraciado accidente “Informático”, un inoportuno apagón de luz o avería del motor de nuestro vehiculo o por la diletante y cambiante naturaleza misma del planeta que pueden convertir al individuo en una especie de “Veleta” que indolentemente se deja llevar por el viento que mas sopla a su favor, con lo cual en realidad nunca goza del verdadero control y proyección de la energía que exige el Ápex, en la T Cuadrada.
 
La mayor parte de las figuras que conforman el conjunto de un tema natal, por no decir todas, suponen toda una suerte de regalo “Karmico”, algunos de ellos envenenados, y ya sea esta figura una T Cuadrada, una Gran Cruz o un Gran Trígono, sea cual fuere la figura o figuras que gobiernan nuestra carta, estas nos piden trascender a través de esfuerzo y trabajo el Área de nuestras vidas que se halle implicadas en ellas, cuando no trabajamos correctamente en la dirección que estas figuras nos indican, debemos de estar dispuestos después a pagar el alto precio que ellas implican, hasta que comprendamos, su uso, manejo y utilidad.